Por estos días algunos papás se preguntan por qué el colegio ha bajado la presencia de co-guías en el Ciclo Salón. Si bien el colegio ya lleva un año aplicando esta medida, que fue informada oportunamente junto a su justificación a través de diversos medios (comunicación, anuario, charla), al parece aún hay apoderados desinformados o que no comprendieron en su momento su alcance. Creemos que el tema de la comunicación interna es un tema a analizar, pero lo que aquí importa es reflexionar si ¿estamos los padres involucrados con el método de enseñanza que escogimos para nuestros hijos?, ¿entendemos a cabalidad los objetivos de la metodología?, ¿estamos utilizando las heramientas que se nos entregan (bibliografía, observaciones en el salón, charlas, talleres, etc.) para potenciar nuestro actuar? Muchas de nuestras angustias no existirían si estuviéramos más atentos, pusieramos más de nuestra parte y asumiéramos que no sólo los niños son Montessori, sino que también tienen que serlo los padres.Uno de los principios fundamentales de nuestra metodología es el principio de autonomía de los niños, por ello la guía debe acompañar al niño en su proceso de enseñanza aprendizaje, presentando contenidos, motivando y estimulando al niño. Además, debe dar espacio para que los niños socialicen transmitiendo sus conocimientos entre ellos. Los protagonistas del salón son los niños y no los adultos. Al tener un grupo de 25 niños con dos adultos de forma permanente (guía y co-guía) se estaba observando que ello generaba una dinámica de dependencia de los niños hacia los adultos en el proceso que no facilitaba la autonomía dentro del salón. La novedad es que la co-guía, hoy, está con una permanencia de media jornada, y cumple una función de apoyo para la guía y los niños. Esta experiencia ha dado muy buenos resultados en otros colegios Montessori que poseen talleres con más de 30 niños, como lo constató Paola Bianchi en sus viajes al extranjero. Pero como cualquier aplicación de un cambio metodológico en el Epullay, esto requiere de un período de observación y análisis del cual la dirección académica manifiesta hacerse cargo, pero una cuestión que está clara: que no es solo un desafío para las guías y los niños, también lo es para los padres, quienes debemos aprender a ser “padres guías” y educar para libertad, aprender a motivar a nuestros niños para que descubran el mundo y no llevarles el mundo, respetar sus elecciones y sus tiempos, aceptar que sean protagonistas de su proceso de aprendizaje y no actores secundarios.
Como Comité de Formación del Centro de Padres y Apoderados del Epullay, queremos decirles a cada uno de los papás que hoy están preocupados, ansiosos o perdidos en estos temas, que, más allá del aporte que el colegio esté haciendo, estamos atentos para acogerlos, escucharlos y ayudarlos en la aventura de ser papás Montessori.
Alejandra Martínez
Integrante del comité de Formación
CEPACE 2009-2010
9 comentarios:
Aclarar respecto a quienes son los desinformados que este cambio se implementó en Marzo y por lo tanto no lleva un año, que la información entregada a fines del año pasado se refería más a la nueva distribución de los cursos al añadir el “D” y que en lo referente a las co-guías solo se mencionó muy breve y sin profundidad (solo leer lo expuesto en el Anuario para que no nos confundamos), y por lo tanto diferimos con usted en aquello de que se “informó oportunamente”. No sé a qué charla, en que se tratara este tema, tuvo usted el privilegio de asistir y lamento que no se haya difundido al resto de los padres y apoderados. Creo que precisamente existe un nivel de desinformación preocupante en estos asuntos, y que es éste el que provoca rumores y desconfianzas.
Me parece que la idea central del artículo es justamente descentrar la discusión de las vicisitudes comunicacionales del colegio (que requeriría de una mención aparte), y volver a lo que nos importa: ¿somos clientes o actores de la formación de nuestros hijos? No dudo de que la medida también tenga ribetes administrativos y económicos, pero no podemos estar siempre sospechando de mala intensión o impulsividad cada vez que se lleva a cabo una medida como esta de parte del colegio.
yo la verdad no tuve conocimiento pero pienso que debiera realizarse una charla con todos los padres que estamos desinformados (por la causa que sea) a fin de que nos expliquen el tema. A la vez que si bien es cierto que debe haber algo economico en la decision del colegio, tambien sospecho que debe existir una razon de fondo y academica de peso e incluso respaldada por estudios que la avalen. No es mi animo polemizar, solo informarme.
Gracias por retomar este espacio para la comunicación y el debate. Somos varios los padres y madres de nuestra comunidad educativa quienes nos sentimos legítimamente preocupados por cualquier ajuste que incida en experiencia de nuestros hijos/as en el salón. La reducción del tiempo y función de la co-guía aún no cumple su primer año y sería muy iportante conocer con detalle el grado de cumplimiento de los objetivos que se fijaron para este cambio, los indicadores con los que se evalua y su comparación con la fórmula anterior, tan relevante como la comparación con experiencias internacionales en contextos distintos. Sería importante también contar con la opinión de las propias guías, de los apoderados de los niveles involucrados y la de los niños/as. No olvidemos que informar es más que anunciar y evaluar es más que observar...
Antes de dar mi opinión o expresar mis inquietudes, me gustaría saber la opinión de los apoderados que tienen hijos en Talleres 2 este año. Ellos han vivido la experiencia y podrían darnos su punto de vista. Para eso, me gustaría que el Cepace hiciera más propaganda de este blog. Aunque algunos sabemos de su existencia y del tema en discuión, me parece que la mayoría de los apoderados no está enterado.
Por otro lado, en alguna ocasión escuché el argumento de que los niños de 3° y 4° básico se mostraban muy poco autónomos y esa era una de las razones para decidir sacar al coguía por media jornada. También recuerdo que una de las supuestas ventajas del Montessori es justamente generar autonomía en los niños. Por lo tanto, si éstos tienen poca autonomía al llegar a 3° básico, concluyo que no se cumplió dicha "promesa". Me pregunto: ¿Por una condición deficiente de los niños o por un trabajo mal logrado de las guías, por lo tanto del colegio?
Me parecería muy interesante que se hiciera una evaluación objetiva de la experiencia y se informaran los resultados de esta evaluación. Me siento completamente identificada con la opinión de Pamela.
Pienso que no se ha tocado el punto de vista de los profesores , creo que para las guias flotantes es màs cansador porque estan a cargo de dos cursos ¿hay alguna evaluaciòn al respecto?
Por otro lado debemos considerar que parte importante del sistema es incorporar niños con cupo de integraciòn, tema que para mì es muy enriquecedor, pero creo que con un guìa (y medio) es muy difìcil llevar adelante a TODOS los niños del salòn. Siento que de alguna manera el sistema con dos guìas fue relevante en mi elecciòn de colegio, propiciando la no exclusiòn y la posibilidad de que los niños sean comprendidos por alguna de las dos guìas que tengan, al tener una guìa, si no son comprendicos tienen dos años de incomprensiòn tiempo largo para un niño.
Pienso que el colegio deberìa acoger las inquietudes de los padres y reevaluar el tema, màs que verlo como una amenza, asì como tambien nosostros debemos plantear los temas con màs altura de miras y despersonalizarlos.
Concuerdo con los comentarios sobre lo deficitario de la información, fue un comunicado muy breve sin mayor profundidad ni justificación. Es necesario buscar una mejor manera de aclarar las muchas dudas...
El tema de la autonomía planteado en el artículo es un argumento muy débil y más parece una definición en ahorro de costos… supongo que hay razones de mayor peso y sería importante una aclaración.
Participar de la formación de nuestros hijos es justamente eso. Ser parte de las decisiones que toma el colegio. Especialmente en lo formativo. Eso significa no sólo "darse por informado". Sino, también no estar de acuerdo.
Por lo tanto no estoy de acuerdo con el cambio y eso no tiene que ver con no entender y compartir la formación Montessori. Reducir el número de guías no es un argumento que diga relación con los resultados de una mejor autonomía. Es sólo una propuesta, que a meses de funcionamiento creo que no ha funcionado. Y la disconformidad de muchas padres al respecto es la mejor prueba de ello. Hay demasiado ruido entre los padres para hacer la vista gorda al respecto. Lo escucho en convivencias particulares, en reuniones, en conversaciones de pasillo. Y ahora, lo veo en este blog. Lo que me parece bien debido a que lo mejor, es la manifestación pública de la disconformidad.
Es importante dejar el tema comunicacional aparte. Centrémosnos en esta nueva modalidad que, para mi gusto, no es buena.
Mi propuesta es hacer mediciones más concretas al respecto y me gustaría escuchar argumentos más sólidos que sólo haber visto resultados en el extranjero. Estamos en Chile y específicamente, un colegio en las faldas de Peñalolén, con caraterísticas muy particulares de una mezcla de la educación scout y Montessori es el que me interesa. No alguno que esté ubicado en las faldas de los Pirineos o en los Alpes.
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